La inteligencia artificial (IA) es parte de nuestro día a día y nos permite convertir en factibles, tareas inviables que implican un análisis elaborado de grandes cantidades de datos. Puede automatizar tareas de aprendizaje largas y complejas y codificar el conocimiento humano.
El aprendizaje automático o “machine learning” es una rama de la inteligencia artificial y se ocupa de la construcción y el estudio de sistemas que pueden aprender de los datos. Esto incluye representación (conocimiento de codificación), generalización (buen desempeño en datos invisibles) y predicción (basada en propiedades conocidas aprendidas de los datos de entrenamiento). Es un método de análisis de datos que utiliza algoritmos para aprender iterativamente, automatizar la construcción de modelos y encontrar información oculta.